¿NAVIDAD CRISTIANA O PROGRESISTA?

¿Navidad Cristiana o Progresista? II.
Por Alexander Kellman,
Activista Católico con Discapacidad visual.
26 de diciembre de 2019.

No a Sincretistas Fiestas Progres de lo Políticamente Correcto.  Tal y como mandata la Declaración Universal de Derechos Humanos, todos tenemos derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión; …, así como la libertad de manifestar nuestra religión o creencia, individual y colectivamente, tanto en público como en privado; sea por la enseñanza, la práctica, el culto y la observancia.  Igualmente, la Convención Americana de Derechos Humanos en el art. 12 establece que “los padres, y en su caso los tutores, tienen derecho a que sus hijos o pupilos reciban la educación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones.”

Ayer fue Navidad; el anterior Ensayo (véase: "El Estado versus la Patria Potestad") se centró en los Instrumentos Internacionales que garantizan la Libertad Religiosa; ahora deseo referirme a la solemnidad de lo que celebramos.

La Natividad es una de las principales y más Solemnes Fiestas del Cristianismo; misma que no es respetada por Religiones, Estados y Gobiernos Laicistas (no Laicos), creyentes que se dejan llevar por la vorágine del placer mercantilizado y consumista; por Ateos, Sincretistas religiosos, muchos Medios de Comunicasión; seguidores del Capitalismo Salvaje, Comunistas, Socialistas o Neomarxistas, Feministas radicales e Ideólogos de Género.  Para responder a quién y qué celebramos utilizaré lo que Eruditos ya han dicho, citando unas frases de un Artículo de Monseñor José Gómez, Arzobispo de la Ciudad de los Angeles, titulado El materialismo de la Navidad:  "Lo que celebramos es al Dios que creó este mundo material de la nada, entrando en su creación para habitarla, descendiendo del cielo para vivir junto a sus criaturas en la tierra. Nuestra vida comienza en el seno de nuestras madres, así que ahí es donde Dios empieza a hacerse humano.”  “La materialidad plena de espiritualidad de la Navidad se corresponde con su humanismo trascendente. Así como toda creación ha de ser apreciada como un don del Creador, así todo hombre y mujer ha de ser acogido y amado, aceptándolo, en primer lugar, en ese sitio en el cual empezó aquí la vida de Jesús: en el niño que se encuentra en el seno materno."  El nacimiento de Nuestro Señor Jesús es el verdadero y único símbolo de la Navidad y no un Personaje obeso, barbudo y vestido de rojo; tampoco Papá Noel ni San Nicolás (Obispo y Mártir) o un bebé que actualmente para algunos representa la Paz; figura surgida en programas de televisión, nacido en el Mundo de lo Políticamente Correcto que con su discurso del Pensamiento único no ofende los sentimientos de ninguna Religión o personas por ser un personaje neutro. Un niño sin Padres, religión, nacionalidad ni raza. Empero, por desidia fuimos los Cristianos los culpables al haber cedido una de las principales fechas y solemnidades de nuestra Religión y Fe por no polemizar u ofender.  Muchos en Sociedades Occidentales se han dejado envolver por la mediatizada, sincretista, consumista y hedonista Fiesta encarnada por el personaje rojo; hace años tamién en su versión femenina y de diferente raza; es decir, una figura explotada comercialmente. Si para la Iglesia Universal siempre los Santos son únicamente del sexo masculino y las Santas son sólo del sexo femenino, ¿qué es Santa Claus si no existe un Varón que sea santa?.

Reflexionemos cómo hoy la Ideología de Género podría manipular una inexistente figura infantil para implantar su Agenda de Diversidad. Reitero, ¿Porqué se respeta la solemnidad y simbología de los principales días del Islam, Judaísmo, Budismo, Sintuísmo y de Grupos Africanos “Animistas” y no las Celebraciones y Solemnidades Católicas y del Cristianismo en general?. Como lo expresa la Declaración sobre la eliminación de todas las formas de intolerancia y discriminación fundadas en la religión o las convicciones: “para quien las profesa, constituyen uno de los elementos fundamentales de su concepción de la vida y que, por tanto, la libertad de religión o de convicciones debe ser íntegramente respetada y garantizada” y “que es esencial promover la comprensión, la tolerancia y el respeto en las cuestiones relacionadas con la libertad de religión y de convicciones…” Entristece escuchar como para gran parte de la Población Católica, Cristianos de otras denominaciones y no Cristianos el Día principal fue el 24 en la noche; tiempo de Espera con alegría por la celebración de una Misa Solemne o Culto, anunciando que al iniciar el día siguiente se cumplirá la Promesa y Misterio  de la Natividad de Nuestro Dios que se hace Hombre.  En el Ensayo pasado decía como valiéndose de las libertades de opinión, expresión y Otras disfrazadas bajo mantos hipócritas de tolerancia se viola reiteradamente la libertad religiosa, irrespetando las Solemnidades Cristianas convertidas en acciones colectivas de días de fiesta en las que se exalta el Consumismo, hedonismo, abuso de drogas sociales, estupefacientes y la cosificación de las mujeres y varones como objetos de placer momentáneo sin medir las consecuencias de actos irresponsables. Época de saludos huecos celebrando todo y nada. A muchos Cristianos nos alegraría que más personas, sin discriminación alguna, celebraran la Natividad de nuestro Señor y Salvador pero respetando su Solemnidad, significado y simbología.  Yo celebré la Natividad de Jesús y tu qué celebrastes: ¿La Verdadera Navidad o una Fiesta Pagana en un Asueto por una Fiesta Cristiana?.  Fuera lo Políticamente Correcto. «Gloria a Dios en las alturas y en la tierra paz a los hombres en quienes él se complace.»